Comencemos estableciendo una definición de comunidad de aprendizaje, tal un grupo de personas que se mantienen unidas compartiendo un interés común. Esta unión resulta de tipo informal y con el propósito de que todos tienen algo que aprender como así también algo que enseñar. Así, nos encontramos en una relación de tipo horizontal entre sus integrantes para la resolución de problemas mediante la participación y ayuda mutua.
Una comunidad sería por tanto un lugar común en el cual sus miembros pueden obtener y compartir información y conocimento.
Si nos referimos a la estructura de una comunidad virtual, podemos decir que existe una clasificación asociada a la participación de sus miembros. Así, la participación online en las comunidades siguen la regla del 90 - 9 - 1 ¿y qué significa?
Ahora, ¿qué ocurre en el ámbito educativo formal? ¿Son las comunidades virtuales espacios propicios de intercambio y de un genuino aprendizaje?
Fernando Santamaría, invitado por EducaconTIC sección Podcast, espacio coordinado por David Álvarez, nos comenta que las comunidades de aprendizaje se focalizan en el mundo de la educación desde una perspectiva de "organización social", concepto que va más allá de un grupo de personas reunidas por intereses comunes. Así, las comunidades de aprendizaje se focalizan en el mundo de la educación y de la enseñanza.
Ahora, ¿qué añade lo virtual a una comunidad de aprendizaje?
Lo virtual ha permitido sin dudas la evolución de una comunidad pues, aunque más débiles, se genera una mayor cantidad de vínculos. Sin embargo, todavía no es posible hablar de comunidades "estrictamente" virtuales, pues aún trabajando en modalidad virtual, la mayoría de sus integrantes se conocen desde lo presencial.
Retomando entonces la pregunta inicial referida a la relación de una comunidad en el ámbito educativo formal, agrego entonces: ¿Es posible trasladar una comunidad de virtual de aprendizaje al aula?
Los invito a escuchar la entrevista donde Fernando Santamaría nos dan su punto de vista...
Una comunidad sería por tanto un lugar común en el cual sus miembros pueden obtener y compartir información y conocimento.
Si nos referimos a la estructura de una comunidad virtual, podemos decir que existe una clasificación asociada a la participación de sus miembros. Así, la participación online en las comunidades siguen la regla del 90 - 9 - 1 ¿y qué significa?
- El 90% de los usuarios son lurkers, es decir, miembros periféricos de la comunidad que observan pero no participan.
- El 9% son los miembros "ocasionales", que participan pero de vez en cuando.
- El 1% constituído por los miembros más activos o líderes, son los usuarios que más participan y contribuyen en la comunidad.
Ahora, ¿qué ocurre en el ámbito educativo formal? ¿Son las comunidades virtuales espacios propicios de intercambio y de un genuino aprendizaje?
Fernando Santamaría, invitado por EducaconTIC sección Podcast, espacio coordinado por David Álvarez, nos comenta que las comunidades de aprendizaje se focalizan en el mundo de la educación desde una perspectiva de "organización social", concepto que va más allá de un grupo de personas reunidas por intereses comunes. Así, las comunidades de aprendizaje se focalizan en el mundo de la educación y de la enseñanza.
Ahora, ¿qué añade lo virtual a una comunidad de aprendizaje?
Lo virtual ha permitido sin dudas la evolución de una comunidad pues, aunque más débiles, se genera una mayor cantidad de vínculos. Sin embargo, todavía no es posible hablar de comunidades "estrictamente" virtuales, pues aún trabajando en modalidad virtual, la mayoría de sus integrantes se conocen desde lo presencial.
Retomando entonces la pregunta inicial referida a la relación de una comunidad en el ámbito educativo formal, agrego entonces: ¿Es posible trasladar una comunidad de virtual de aprendizaje al aula?
Los invito a escuchar la entrevista donde Fernando Santamaría nos dan su punto de vista...