La idea que las TIC facilitan el desarrollo de procesos colaborativos en situaciones de enseñanza y de aprendizaje, y que los entornos mediados por una computadora pueden mejorar la interacción y el trabajo en grupo, y por ende los resultados en el aprendizaje, parece estar ya fuera de discusión.
Ana Laura Rossaro, nos dice que, "si tuviéramos que sintetizar las habilidades del siglo XXI podríamos decir que éstas son: la alfabetización tecnológica, el pensamiento crítico y la colaboración".
La colaboración, además de requerir de un estilo particular de trabajo, involucra aspectos sociales relacionados con la interacción: un enfoque social del aprendizaje en el sentido de Vigotsky, aprender del otro y con el otro.
El trabajo colaborativo favorece el desarrollo de habilidades tanto cognitivas como sociales e interpersonales y, gracias a las herramientas tecnológicas que nos provee la Web es posible crear entornos socioculturales, en los que interactuamos con otros, compartimos intereses, buscamos alternativas, construyendo así redes sociales de aprendizaje.
Sin embargo, a pesar de tener las condiciones favorables para la producción de conocimiento en un ambiente de colaboración, "sabemos competir, pero no colaborar", así lo explicita, Alfons Cornella en esta maravillo presentación de TEDxRosario.
Argumenta: "....es imposible construir un espacio de colaboración en una economia competitiva si no hay confianza, y ésta deriva de la generosidad. Sin generosidad no se puede hacer nada nuevo".
Luego, es imposible pensar en innovar sin generosidad, y ésta implica confianza y colaboración.
Como propósito para este nuevo año que recién comienza, propongo pensar propuestas que promuevan tareas colaborativas y habilidades de aprendizaje en entornos virtuales y para el trabajo en grupo.
FELIZ 2012!!!
Ana Laura Rossaro, nos dice que, "si tuviéramos que sintetizar las habilidades del siglo XXI podríamos decir que éstas son: la alfabetización tecnológica, el pensamiento crítico y la colaboración".
La colaboración, además de requerir de un estilo particular de trabajo, involucra aspectos sociales relacionados con la interacción: un enfoque social del aprendizaje en el sentido de Vigotsky, aprender del otro y con el otro.
El trabajo colaborativo favorece el desarrollo de habilidades tanto cognitivas como sociales e interpersonales y, gracias a las herramientas tecnológicas que nos provee la Web es posible crear entornos socioculturales, en los que interactuamos con otros, compartimos intereses, buscamos alternativas, construyendo así redes sociales de aprendizaje.
Sin embargo, a pesar de tener las condiciones favorables para la producción de conocimiento en un ambiente de colaboración, "sabemos competir, pero no colaborar", así lo explicita, Alfons Cornella en esta maravillo presentación de TEDxRosario.
Argumenta: "....es imposible construir un espacio de colaboración en una economia competitiva si no hay confianza, y ésta deriva de la generosidad. Sin generosidad no se puede hacer nada nuevo".
Luego, es imposible pensar en innovar sin generosidad, y ésta implica confianza y colaboración.
Como propósito para este nuevo año que recién comienza, propongo pensar propuestas que promuevan tareas colaborativas y habilidades de aprendizaje en entornos virtuales y para el trabajo en grupo.
FELIZ 2012!!!